En el campo de paradas del Cantón Militar en Neiva, 145 soldados profesionales fueron despedidos por la Novena Brigada. Compañeros y superiores reconocieron en ellos el arrojo, la perseverancia y voluntad inquebrantable de servicio que caracterizó su labor durante sus 20 años de servicio en el Huila.
Soldados íntegros que, con el acompañamiento de Dios y el apoyo invaluable de sus seres queridos, siempre estuvieron dispuestos a ofrendarlo todo por el progreso de Colombia.
Fue esta la oportunidad para agradecer la entrega de estos héroes a los más nobles ideales; honor que le correspondió al coronel Edwin Becerra Díaz, comandante de la Novena Brigada:
“Este día se traduce sin duda en el inolvidable momento en el que como si de una película se tratara comienzan a pasar por sus mentes los momentos que marcaron su paso por nuestra gloriosa institución. Desde el momento en el que sin más que un inmenso amor por la patria y la valentía de un buen colombiano asumieron recorrer y defender cada rincón del país llevando a una nación completa en sus hombros.
Eso es lo que llevan los soldados en sus espaldas, su equipo representa todo lo necesario para vivir: su fe, su familia, la motivación, la promesa de volver y la convicción de entregar lo mejor de sí por defender a quienes los conocen y a quienes no”.
El alto oficial aseguró que son ellos quienes hoy pasan a ser parte de la Reserva Activa, ejemplo de abnegación y cumplimiento del deber constitucional; garantizaron y seguirán garantizando la estabilidad de la democracia, preparados y firmes a atender el llamado de la patria porque en sus corazones permanece intacto el amor por su país y el deseo de una Colombia siempre “grande, respetada y libre”.
Desde hoy empiezan nuevos proyectos de vida, pero es claro que estos 145 valientes ciudadanos, desde donde se encuentren, seguirán contagiando a los colombianos de la necesidad de buenos ciudadanos que trabajen en función de un mejor país.
