La Oficina para la Gestión del Riesgo de Desastres del Huila informó que los municipios de Neiva, Tello, Teruel y Oporapa se encuentran en alerta roja debido a la alta probabilidad de deslizamientos de tierra. Las fuertes lluvias que persisten en el departamento han incrementado las amenazas, por lo que los Concejos Municipales de Gestión del Riesgo mantienen un monitoreo permanente en estas zonas críticas para proteger a la población.
Además, otros municipios como Acevedo, Garzón, Nátaga, Palestina, Saladoblanco, San Agustín y Suaza están en alerta amarilla por el mismo fenómeno. El IDEAM advirtió sobre la posibilidad de deslizamientos en estas áreas, por lo que las autoridades locales han intensificado la vigilancia en puntos identificados previamente como de alto riesgo por movimientos en masa.
Las lluvias también han generado emergencias en seis municipios del departamento, con afectaciones en varias de sus veredas. Isnos es el más impactado, con seis emergencias activas y daños reportados en sectores como Cámbulos, Canastos, Ciénaga Chiquita, Paloquemao, San Lorenzo y Bajo Magdalena. Los organismos de socorro trabajan en la atención de estas situaciones.
Entre los casos recientes, se registraron deslizamientos en Pitalito que afectaron viviendas; en Oporapa, un deslizamiento bloqueó una vía terciaria; y en Neiva, los daños se concentraron en un asentamiento urbano. En El Pital y Tarqui, crecientes súbitas de quebradas ocasionaron daños en infraestructura, incluyendo un puente vehicular artesanal en Tarqui que está siendo evaluado por las autoridades.
Hasta ahora, la actual temporada de lluvias ha dejado un saldo de 583 familias damnificadas, es decir, cerca de 2.905 personas afectadas en el Huila. Las autoridades continúan en alerta y hacen un llamado a las comunidades a estar atentas a los comunicados oficiales y reportar cualquier situación de emergencia.
