Por: Faiver Hoyos Hernández
Históricamente al Huila le ha ido remal con la clase parlamentaria que ha elegido y peor con quienes nos han representado en los últimos años. La actual puja por la cámara baja por ejemplo deja muchas dudas, sobre quienes podrían tener la opción de ser Representantes a la Cámara, por cuanto los partidos y movimientos políticos han tenido enormes dificultades para conformar sus listas.
La ausencia de liderazgo en la región es notable, sumado a la complicidad de los jefes y caciques políticos, ha obligado a elegir a los mismos actores, lo cual repercute en que se repita la película del continuismo, la desazón y un lejano interés del Gobierno central en hacer inversiones en nuestro territorio.
A veces cuestionamos, que los huilenses hayan pasado cuenta de cobro a los Senadores del Huila en las elecciones del 2022 y que muchos congresistas foráneos sacaran enorme cantidad de votos refrendando sus credenciales. Es sin duda un reflejo claro de querer cortarle la cabeza a quienes chuparon teta y poco o nada gestionaron por el Huila.
Las listas a la Cámara actualmente no tienen claridad en su conformación. En el periodo anterior, se eligieron algunos con líos jurídicos, a los cuales les quitaron su credencial desarticulando el trabajo en bancada que pudo dar mejores resultados. La irresponsabilidad de algunos de estos personajes, por quienes votamos y me incluyo, nos hizo ver un chispero, por cuanto se esfumaron cuatro años de desgracia para el departamento en materia de gestión.
Invito a los huilenses a revisar muy bien las hojas de vida de los candidatos y sugiero además que a aquellos que nos hicieron meter las de caminar, les castiguemos en las urnas en sus futuras pretensiones políticas. No puede ser uno tan irresponsable con sus votantes de lanzarles al abismo, para salir nuevamente a clamar por el favor popular.
Son muchos los movimientos que se vislumbran dentro de las especulaciones por las conformaciones de las listas, sin embargo, aunque algunos son favoritos, ellos podrían quedarse viendo un chispero, porque sus compañeros de fórmula en los equipos que se estructuran podrían no aportar lo suficiente para materializar umbral.
Recuerdo un episodio en 2018, cuando Jorge Eduardo Gechem en la Lista de Cámara de la U, le ganó a Héctor Javier Osorio, sin embargo, los restantes integrantes Ana María Rincón y César González, penosamente apenas obtuvieron votación como para ser elegidos ediles en Neiva. Esto favoreció al Centro Democrático que con lista cerrada logró mayores sufragios, dando en aquel entonces la credencial de Representante al hoy Presidente del CNE Álvaro Hernán Prada.
No estamos lejos que se repita la historia. Han sido tan nefastos nuestros Representantes actuales que en pasillos se espera que surjan otros candidatos. Sería oportuno hacer un inventario de las obras y gestiones de recursos para el Huila traídos por quienes actualmente tienen asiento en Cámara: Flora Perdomo, Julio César Triana, Luz Ayda Pastrana y Leyla Rincón. Creo que todos se rajan. En una próxima columna les contaré, altas y bajas de cada uno de ellos.
Hemos dado tumbos en el historial político del Huila. Los congresistas del pasado proyectaron el departamento con inversiones gigantestas. Como extrañamos a Guillermo Plazas Alcid, Rodrigo Lara Bonilla y al mismo Gechem Turbay; quienes hablaban y tenían peso nacional. Inclusive los conservadores Felio Andrade, Héctor Polanía y recientemente Hernán Andrade. Por lo demás, que entre el diablo y escoja. No hay liderazgo ni capacidad de reacción a las crisis que afectan al Huila.
Definitivamente estamos huérfanos de clase parlamentaria, que defienda nuestros intereses. Nos quedamos en una lucha contra el Gobierno, solo por hacer oposición y hacernos ver más grandes, alzando la voz. Se nos olvida que los ciudadanos han despertado y que están dispuestos a continuar pasando factura por sus errores. Aquella época de las tejas de zinc y el cemento; no son garantía para garantizar el voto. Pronto les contaré quienes aspiran y por quienes no votaría, porque sería continuar camino al despeñadero.
Cápsula 1: Gracias a Lucho Noticias, mi amigo de muchos años en LA NACIÓN que me invitó a ser Columnista en este importante medio de comunicación, para mí el más popular de la región.
Cápsula 2: Huila no tiene estadio, la pista atlética la desparecieron, las piscinas olímpicas se acabaron, las canchas sintéticas se acabaron. Ya es hora de que los Gobernantes, dejen de hacer política con el deporte. Así es difícil exigir resultados a nuestros atletas.