Tremenda papa caliente resulta el estadio de fútbol ‘Guillermo Plazas Alcid’ el cual está puesto en el ojo del huracán desde aquel 19 de agosto, cuando cálculos mal hechos y procedimientos pésimamente concebidos hicieron que parte de la tribuna de occidental colapsara. Lo nefasto, además de la tragedia, ha sido como nuestra clase política lo volvió tema de campaña. Sobre esto hay discursos de alcaldes, gobernadores y hasta congresistas, quienes pusieron sus nombres a consideración de los huilenses, apostándole a recuperar el escenario deportivo más importante del sur colombiano, con tal de conseguir réditos en las urnas.
Haciendo memoria, su inauguración, la del ‘Plazas Alcid’, se dio de manera oficial para 1980, cuando Neiva fue designada por el entonces Coldeportes, sede de los Juegos Atléticos Nacionales, en donde la delegación que nos representó logró consolidar un dignísimo cuarto puesto al término del evento. Hasta ese momento el estadio era suficiente por cuanto tampoco había un equipo profesional en primera categoría. Años atrás, existió el Deportivo Huila que en la misma cancha del barrio La Libertad, pero en viejas graderías entre madera y metal, jugó inclusive un partido internacional con el Bangu Atlético Clube de Brasil, que hacía gira por Colombia.
Entre las décadas del 80 y 90 surgieron los Torneos de Segunda División, en los cuales los clubes Nuevos Valores y Juventud Huila hacían que Neiva fuera visitada por equipos de primera categoría en el país. Y precisamente en 1990 surge el Atlético Huila que dirigido por Víctor Segundo Quiñones en 1991 participó en la primera edición del Torneo de Ascenso conocido como Copa Concasa que le permitió a Envigado ascender, dejando al Huila relegado al segundo puesto. Dimayor había creado este certamen para consolidar un grupo par en la categoría especial.
Para 1992 vino el ascenso del Atlético Huila y con ello la necesidad de ampliar la tribuna de oriental. Fue así como las obras permitieron tener un estadio con capacidad para 27 mil espectadores, siendo este el mayor aforo en la historia. Sin embargo, los anhelos de albergar partidos de la Selección Colombia y Torneos Internacionales generaron la inquietud de ampliar la tribuna occidental. Significaba aproximarnos a los 40 mil aficionados y pensar en grande.
El consorcio Estadio 2014 ganó la licitación. Los dineros aprobados a invertir para la misma se acercaron a los 30 mil millones de pesos, incluidas obras, interventoría y adicionales. El colapsó de la viga aquella tarde (19 de agosto de 2016) produjo un estruendo que se escuchó en toda Neiva. Cuatro obreros murieron sepultados entre arena y cemento, mientras otros 10 terminaron con heridas de suma gravedad. Estalló desde aquel entonces una cacería de brujas.
La clase política opositora al alcalde Pedro Suárez celebraba que la Fiscalía le llevase preso, incluidos algunos de los funcionarios que participaron en la adjudicación y desarrollo de la obra. Nadie dimensionaba que el caos por los líos jurídicos iba a terminar retrasando la tan publicitada modernización, desatando escándalos a todo nivel, por cuanto la inversión de los dineros públicos se diluía.
Mientras tanto el Alcalde del momento Rodrigo Lara declaró la caducidad del contrato y con ello las pólizas se activaron. Actualmente cursan varias demandas por el fallido intento de remodelación. Actualmente surge nuevo capítulo: un crédito por 28 mil millones radicado ante el Concejo de Neiva por el Alcalde German Casagua para completar los cerca de 56 mil que cuesta tumbar lo que hay, además de impactar en zonas externas y recuperar la pista atlética que los magos del consorcio Estadio 2015 decidieron eliminar.
Por estos días concejales amigos de la Administración nos ponen a echar humo sobe qué es lo mejor, cuando sabemos que en el fondo darán el sí al nuevo capítulo de endeudamiento.
Cápsula 1: ¿Se dará la pela el Concejo en aprobar este empréstito cuando los primeros 80 mil, ya aprobados, aún no surten efectos que beneficien a los neivanos?
Cápsula 2: Por encima de las destruidas vías de la ciudad y la falta de mejores oportunidades, está en prioridad terminar la tribuna occidental. ¿Será por la promesa de campaña? Usted qué haría…