El Gobierno de Sudán presentó una queja formal ante el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, acusando a Emiratos Árabes Unidos (EAU) de intervenir directamente en la guerra que azota al país africano. Según el documento, esta participación constituye una grave violación de la soberanía nacional y una amenaza a la paz regional.
La denuncia, de seis páginas, fue presentada por el representante sudanés ante la ONU, Al-Harith Idriss Al-Harith, quien aseguró que existen pruebas documentadas de que Emiratos Árabes financia, recluta y despliega mercenarios para respaldar a las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), consideradas un grupo paramilitar rebelde.
En el informe, Sudán advierte que entre 350 y 380 mercenarios colombianos, en su mayoría exmilitares, han sido contratados a través de empresas de seguridad privadas con sede en EAU, entre ellas Global Security Services Group (GSSG) y International Services Agency (A4SI).
El documento detalla una ruta logística que incluye traslados aéreos desde Emiratos Árabes hasta Somalia y Libia, con apoyo de aliados del general Khalifa Haftar, para luego ingresar a Sudán por tierra a través de Chad. Solo entre noviembre de 2024 y febrero de 2025, se habrían realizado 248 vuelos con personal y equipo militar hacia territorios controlados por las RSF.
La acusación también señala que los mercenarios estarían involucrados en violaciones graves al derecho internacional, incluyendo el uso de armas prohibidas y el entrenamiento de niños soldados, hechos que agravan la crisis humanitaria en Sudán.