El expresidente de Colombia, Álvaro Uribe Vélez, fue condenado a 12 años de prisión tras ser hallado culpable de los delitos de soborno en actuación penal y fraude procesal. La sentencia establece que el exmandatario podrá cumplir la condena bajo la modalidad de prisión domiciliaria.
Además de la pena privativa de la libertad, Uribe deberá pagar una multa equivalente a 2.420 salarios mínimos y quedó inhabilitado para ocupar cargos públicos por un periodo de ocho años y tres meses. La decisión fue tomada por la juez 44 penal de conocimiento de Bogotá, Sandra Liliana Heredia.
La funcionaria judicial determinó que el expresidente, quien gobernó el país entre 2002 y 2010, “determinó” a emisarios para manipular testigos en las cárceles con el fin de que se retractaran de señalamientos que lo vinculaban con grupos paramilitares. Este fallo marca un nuevo capítulo en el proceso judicial que por años ha enfrentado el exmandatario.
La defensa de Uribe, encabezada por el abogado Jaime Granados, tendrá cinco días hábiles para presentar la apelación con la que buscará tumbar el fallo de primera instancia. La fecha límite para radicar el recurso vence el 11 de agosto.
El caso será trasladado al Tribunal Superior de Bogotá, que designará un grupo de magistrados, entre ellos Manuel Antonio Merchán, para estudiar la segunda instancia. Esta podría ratificar la condena ya impuesta o, por el contrario, revocar la decisión y absolver al expresidente. “Vamos a apelar y lo haremos dentro del término legal, pero primero debemos estudiar a fondo la sentencia”, explicó Granados.







