
Durante una sesión en la Asamblea del Huila, la directora de la Oficina de Gestión del Riesgo, Isabel Hernández, presentó un preocupante balance sobre los efectos de la temporada de lluvias: 36 municipios han sido afectados por 295 emergencias entre deslizamientos, inundaciones y crecientes súbitas.
La situación deja hasta el momento una persona fallecida, 13 heridas y 198 familias damnificadas, además de más de 200 infraestructuras impactadas, incluyendo vías, puentes y centros educativos. Siete municipios han declarado la calamidad pública, siendo Santa María el más afectado, con el 90 % de su red vial terciaria destruida.


Para enfrentar esta emergencia, se han desplegado más de 2.000 horas de maquinaria amarilla, con apoyo de autoridades locales y del gobierno departamental, que además ha elevado solicitudes de ayuda al nivel nacional. El diputado Armando Acuña, quien promovió la citación, pidió que se destinen recursos del superávit para apoyar a los municipios, ante la escasez de maquinaria.
Hernández también alertó sobre un nuevo riesgo: los incendios forestales que podrían presentarse en el segundo semestre del año. Anunció que ya se trabaja en un plan de contingencia para anticiparse a esta amenaza y reiteró el llamado a la solidaridad institucional y al gobierno nacional para reforzar la atención a esta crisis climática.