De acuerdo con el Instituto Nacional de Salud, los quemados disminuyeron un 4,53 % respecto a la misma fecha de 2021. Solo entre el 1 y el 18 de diciembre de este año, el INS registró 337 lesionados con pólvora. Mientras tanto, durante las mismas fechas del año pasado, se reportaron 353 casos.
De acuerdo con el último informe, 133 de los lesionados son menores de edad y 15 de ellos estaban en compañía de un adulto bajo los efectos del alcohol en el momento en que sufrieron sus quemaduras.
Las 204 personas restantes eran mayores de 18 años, de las cuales 85 estaban en estado de embriaguez.
Un dato que ha llamado la atención es que buena parte de las personas que resultan afectadas por el uso de estos artefactos no eran quienes los estaban manipulando, de hecho, según los datos del INS, el 22,3 % de los lesionados eran simplemente observadores del uso de pirotecnia.
El INS detalló que en los primeros 18 días de diciembre no hubo ningún fallecido debido al empleo inadecuado de la pólvora; sin embargo, el 91,1 % de los casos son quemaduras. De estos, el 60,2 % son por laceración, el 21,7 % por contusión, el 5,9 % por amputación, el 2,7 % por daño auditivo y el 6,2 % por daño ocular.