Hugo Gerardo Bonilla Córdoba, inspector de Policía de Pitalito, Huila, fue judicializado por un despacho fiscal de ese municipio por el delito de concusión, el cual habría cometido cuando constreñiría a una ciudadana a entregarle dinero a cambio de permitirle avanzar en una construcción.
Todo ocurrió el 12 de febrero de 2024 cuando el procesado supuestamente llegó al barrio León Ruiz donde se adelantaba una obra y le informó al maestro que realizaba dichos trabajos, que no podía continuar por no tener unos supuestos permisos, y que por tanto debía cancelarle la suma de $1.500.000, accediendo finalmente a dejarlo en $1.000.000.
Fue así como como el trabajador se puso en contacto con la dueña de la vivienda para comentarle lo que estaba ocurriendo quien no dudó en denunciarlo, pero antes acordó la entrega con el inspector en vía pública, diagonal a la Alcaldía Municipal.
Luego de recibir el dinero uniformados del Gaula de la Policía lo siguieron, siendo capturado en el cuarto piso de la Alcaldía, su lugar de trabajo.
Durante las audiencias de rigor no aceptó los cargos enrostrados por el delegado fiscal y fue cobijado con medida de aseguramiento en su domicilio.