Tras casi dos años al frente del Atlético Huila, Maruán David Issa oficializó su retiro del club y la entrega de la marca al empresario Felipe Olave Blackburn, quien asumirá el reto de reconstruir el proyecto deportivo. En entrevista con LA NACIÓN y LA NACIÓN Stereo, Issa habló de las inversiones realizadas, los obstáculos institucionales y su dolorosa despedida de Neiva.

Issa recordó que su gestión inició en 2023 con la ilusión de salvar al equipo del descenso y consolidar un modelo formativo. “Invertimos en jugadores, mejoramos el estadio, modernizamos la sede de Rivera e impulsamos un proyecto juvenil que hoy es referente nacional. Pero no encontramos acompañamiento real ni soluciones a los problemas estructurales”, afirmó.

Uno de los momentos más difíciles, dijo, fue la decisión de cerrar el estadio de Neiva al público, lo que afectó el vínculo con la hinchada. “Después de llenar estadios, pasamos a jugar sin gente. Fue el golpe más fuerte. No hubo respuesta ni alternativas del entorno local”, relató.

El dirigente también habló del traslado del equipo a Yumbo, donde se disputará el torneo de 2025. “Nos abrieron las puertas, pero con la condición de cambiar el nombre. Fue un paso doloroso, aunque era la única opción para competir. Garzón se consideró para categorías juveniles, pero nunca como sede del primer equipo”, aclaró.

Con voz entrecortada, Issa se despidió destacando los logros de las divisiones menores y el cariño de la afición. “El Atlético Huila juvenil fue campeón y subcampeón nacional en menos de un año. Eso demuestra que el trabajo se hizo con amor. Neiva me dio mucho, y aunque hoy duele irme, me quedo con la satisfacción de haberlo intentado todo”, concluyó.