La monja fue recibida por un grupo de religiosas de la Congregación Hermanas Franciscanas de María Inmaculada, de la que hace parte, en el Aeropuerto El Dorado de la ciudad de Bogotá y también fue recibida por miembros de la Policía Nacional.
Gloria Cecilia Narváez, de 59 años y oriunda del departamento de Nariño, fue secuestrada el 7 de febrero de 2017, cerca de la capital de Malí; la religiosa trabajaba como misionera en la parroquia de Karangasso hasta que fue secuestrada por yihadistas.
A su llegada a Colombia, la religiosa resaltó que el señor le permitió resistir durante cuatro años y contó que en su secuestro siempre pensó en los colombianos que vivían la misma situación en nuestro país.
«Aunque fue duro y difícil estar en este desierto, yo creo que Dios fue grande conmigo y me dio la oportunidad de seguir viviendo mi misión. Yo pensaba en todos los sufrimientos que pasa la gente cuando está secuestrada aquí mismo en Colombia, en el mundo entero, allá en Malí, cuántas personas todavía han quedado», indicó la religiosa a un medio nacional.
Narváez fue liberada el pasado 9 de octubre. Un día después fue recibida por el papa Francisco en el Vaticano. La religiosa llegó a Colombia en un vuelo proveniente de Roma luego de hacer una escala en la ciudad de Madrid, España. Ahora, se espera que llegue a Pasto, de donde es oriunda.