
Una creciente súbita de la Quebrada Garzón, puso recientemente a prueba una obra de protección que hoy se consolida como un hito en la gestión del riesgo del municipio: un muro de contención en concreto reforzado de 6 metros de altura, 5 metros de ancho y 50 metros de longitud, cuya construcción se logró gracias a la oportuna decisión del gobierno municipal, encabezado por el alcalde Francisco Calderón Feriz.
La obra fue posible en tiempo récord tras la declaratoria de calamidad pública expedida por la administración municipal, lo que permitió activar mecanismos de respuesta inmediata para proteger a las comunidades en riesgo. Según el mandatario, esta intervención fue priorizada con base en los niveles de vulnerabilidad que presentaba la zona y la necesidad urgente de evitar pérdidas humanas y materiales.
“Gracias a la decisión acertada y rápida de nuestro equipo, y a la declaratoria de calamidad pública, hoy esta obra ya está salvando vidas. La creciente reciente de la quebrada demostró que el muro cumplió su función: protegió a las familias que antes vivían con miedo”, afirmó el alcalde Calderón.
La construcción del muro, actualmente en ejecución, fue diseñada para resistir eventos naturales extremos. Su desempeño reciente refuerza la importancia de la planificación preventiva en la gestión del riesgo y marca un precedente de intervención efectiva en el municipio.