La Superintendencia de Salud anunció nuevas medidas preventivas a la Nueva EPS con el propósito de proteger a sus afiliados y garantizar el correcto uso de los recursos del Sistema General de Seguridad Social en Salud.
Una de las acciones incluye una orden a la contralora designada para la EPS, quien deberá hacer seguimiento a las postulaciones para el giro de recursos a la red de prestadores y proveedores de servicios de salud.
Además, un equipo técnico de la Delegatura de Aseguramiento realizará seguimiento presencial y permanente en la sede de la Nueva EPS al plan de trabajo definido por la Supersalud para la entidad.
La contralora deberá emitir un concepto técnico sobre la legalidad, oportunidad y destinación de los recursos, documentando sus análisis y recomendaciones sobre la viabilidad de los giros realizados por la EPS.
El superintendente Giovanny Rubiano enfatizó que el objetivo es verificar en tiempo real el cumplimiento de las acciones y evitar retrasos o barreras en la atención que puedan poner en riesgo el derecho a la salud de los ciudadanos.