En la tarde de este miércoles, el papa Francisco acudió al Policlínico Gemelli, hospital que ha recibido históricamente a los papas, para someterse a “algunos controles programados con anterioridad”.
Como de costumbre, Francisco celebró la Audiencia General desde la Plaza de San Pedro y, a pesar de haberla conducido en su totalidad, algunos se percataron de ciertas dificultades respiratorias mientras se dirigía a los fieles, como la falta de aire entre algunas de las oraciones.
Según el diario Corriere della Sera, el Papa habría comenzado a sentir dolor en el pecho y problemas respiratorios inmediatamente después de la audiencia general celebrada en la plaza de San Pedro, y cuando ya se encontraba en su residencia en Casa Santa Marta se le aconsejó que acudiera al servicio de cardiología del hospital romano para hacerse unos controles.
De momento, el sumo pontífice se encuentra ingresado en el Agostino Gemelli de Roma.