El Parque Natural Regional El Dorado, localizado en los municipios de Isnos, Saladoblanco, Oporapa, La Argentina y La Plata, cumplió su segundo aniversario de declaratoria como área protegida del Huila y para conmemorar esa fecha, el Consejo Directivo de la CAM aprobó el Plan de Manejo Ambiental de las más de 28 mil hectáreas que lo conforman.
El documento realizado bajo los parámetros establecidos en el Decreto 1076 de 2015 del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, se convierte en la hoja de ruta en cuanto al manejo y ordenamiento de esta área protegida para los próximos cinco años. Para su formulación, un equipo interdisciplinario evaluó las fortalezas ambientales y las principales presiones a las que se enfrenta la zona.
“Este es un parque supremamente estratégico, ya que conectan todas las áreas de páramo del macizo colombiano con los ecosistemas andinos y subandinos de la región de Serranía de Las Minas y donde se concentra una gran variedad en aves y de especies emblemáticas y carismáticas como el oso andino, la danta de montaña y el águila crestada”, señaló Camilo Augusto Agudelo, director general de la CAM.
Plan estratégico de manejo
El plan de manejo ambiental se centra en la apropiación social e institucional por el área protegida; para ello, considera cinco objetivos estratégicos y 12 objetivos específicos con los cuales busca: conservar los ecosistemas naturales existentes; reducir las fuentes de presión provenientes de los sectores con mayores dinámicas de afectación; promover la generación de conocimiento, teniendo en cuenta la participación de la comunidad; desarrollar acciones integrales de educación y comunicación ambiental y realizar un manejo efectivo de manera participativa, que permita fortalecer la gobernanza del área protegida.
“Nos sentimos a gusto porque este es un plan que fue construido con las comunidades asentadas en la zona y con la institucionalidad para marcar una estrategia completa para su protección y conservación, con acciones concretas y recursos asignados”, indicó Agudelo.
Dentro de las acciones puntuales a realizar, que contará con una importante inversión, se encuentra la compra de predios de importancia ambiental, restauración ecológica, aplicación de incentivos a la conservación, autoridad ambiental, monitoreo comunitario, ecoturismo local, sistemas productivos sostenibles y procesos de investigación en las especies objeto de conservación como la perdiz colorada, tapaculo del Magdalena, águila crestada, loro orejiamarillo, oso de anteojos, danta de montaña, puma, entre otras.