Durante la Cuarta Conferencia Internacional sobre Financiación para el Desarrollo, realizada en Sevilla (España), el presidente Gustavo Petro y su homólogo francés, Emmanuel Macron, protagonizaron un tenso intercambio de posturas en el panel Cambio de paradigma para soluciones dirigidas por el país a los desafíos de nuestro tiempo. El eje del debate fue la forma en que el norte global está enfrentando la crisis climática y migratoria.
El presidente colombiano acusó a Estados Unidos y Europa de haber desplazado el enfoque climático en las agendas internacionales y de fomentar discursos antimigrantes para ganar apoyo electoral. Señaló que el auge de la extrema derecha en países del G20 permite negar la crisis ambiental y responsabilizó a las potencias por su lentitud en responder a emergencias globales, como ocurrió con la distribución de vacunas durante la pandemia.
“Hoy se gana más con mentiras y fetiches, expulsando a los que no tienen el mismo color de piel ni religión. Mientras tanto, al sur global se le dan limosnas. Vi cómo las vacunas llegaron primero a Estados Unidos y Europa, y después a los países pobres. ¿Cuántos muertos gratuitos hubo?”, expresó Petro en un tono crítico que incomodó a Macron.
La respuesta de Macron
El mandatario francés, visiblemente molesto, respondió pidiendo respeto. Aseguró que en Europa también existen líderes que luchan contra la extrema derecha y que no comparten una visión negativa sobre la migración. “Nunca doy lecciones al sur y es extraño recibirlas. No simplifiquemos la política ni dividamos el mundo entre ricos y pobres”, dijo Macron.
El francés añadió que Petro fue el primero en mencionar la migración durante el panel y negó que en Europa exista una obsesión con ese tema. Macron concluyó su intervención haciendo un llamado a construir puentes y evitar discursos que profundicen las divisiones globales.
