El presidente Gustavo Petro repudió el atentado con explosivos contra una base militar en Arauca, que dejó dos soldados muertos y 27 heridos. Las autoridades atribuyen el ataque al Ejército de Liberación Nacional (ELN). Petro calificó la acción como un «golpe al proceso de paz» en curso con la guerrilla.
“Una bolqueta cargada de explosivos que hiere a 27 jóvenes y mata a dos fue puesta por el ELN, con quienes estábamos conversando de paz. Esto prácticamente cierra un proceso de paz con sangre”, afirmó el mandatario, comparando el atentado con el de la Escuela de Cadetes General Santander en 2019.
Petro destacó las dificultades de avanzar hacia una paz sostenible en Colombia, señalando que la violencia parece ser un ciclo sin fin en la historia del país. Horas antes, el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, también condenó el ataque, cuestionando la voluntad de paz del ELN y expresando su solidaridad con el pueblo de Arauca.