El Congreso de Perú rechazó enérgicamente las recientes declaraciones del presidente colombiano Gustavo Petro, quien acusó al país andino de apropiarse de la isla de Santa Rosa, un territorio amazónico ubicado frente a la ciudad colombiana de Leticia. Según el mandatario, Perú estaría violando acuerdos internacionales que establecen los límites fronterizos.
A través de un comunicado, la mesa directiva del Parlamento peruano defendió la soberanía sobre la isla, afirmando que está respaldada por el Tratado Salomón-Lozano de 1922 y el Protocolo de Río de Janeiro de 1934, ambos vigentes y ratificados por Colombia y Perú. El Congreso también recordó que Santa Rosa está oficialmente reconocida como parte del departamento de Loreto.
La isla, formada por sedimentos fluviales hace alrededor de 50 años, ha sido habitada históricamente por ciudadanos peruanos. En 2005 fue categorizada como centro poblado y en julio de este año se oficializó su reconocimiento como distrito propio, decisión aprobada por unanimidad en el Congreso peruano y publicada en el diario oficial El Peruano.
El presidente Petro, sin embargo, denunció que esta decisión representa una violación del Protocolo de Río de Janeiro, que definió la frontera entre ambos países como la línea más profunda del río Amazonas. A través de su cuenta en X, afirmó que el gobierno peruano «ha copado un territorio que es de Colombia».
Ante estas declaraciones, el Parlamento de Perú reiteró que la creación del distrito de Santa Rosa se realizó en estricto cumplimiento de los tratados internacionales, y rechazó cualquier intento de desconocer su soberanía sobre el territorio. La tensión diplomática entre ambos países continúa creciendo.