Desde la guarnición militar donde se encuentra recluida, Aida Merlano Rebolledo reapareció este jueves ante un juez en una audiencia que marcó un nuevo capítulo en su proceso judicial. La excongresista, que se fugó de un consultorio odontológico en 2019, habló sobre su tiempo en reclusión y su estancia en Venezuela, describiendo las condiciones como “deplorables” y señalando que ha estado sometida a situaciones difíciles durante tres años en ese país.
Merlano expresó sentirse tranquila en su actual lugar de reclusión y aseguró haber reflexionado sobre sus errores. “He podido darme cuenta de los errores que tenía, no como política, sino como ser humano, como madre, como familia, y creo que he ganado mucho”, afirmó la exparlamentaria. Sin embargo, pidió que cesaran las “sevicias” en su caso y que no se la juzgara públicamente, alegando que solo ella conoce las razones que la llevaron a fugarse.
En septiembre de 2024, Aida Merlano aceptó haber cometido el delito de fuga de presos, mediante un preacuerdo con la Fiscalía General de la Nación, que ahora está a la espera de aprobación judicial. La decisión sobre este preacuerdo será tomada por un juez el próximo 5 de diciembre, lo que determinará si se valida la negociación con el ente acusador.
Cabe recordar que Merlano cumple además dos condenas impuestas por la Corte Suprema de Justicia: en septiembre de 2019 fue sentenciada a cinco años y seis meses de prisión por superar los topes de gastos de campaña y a 11 años y cuatro meses por compra de votos, delitos que constituyen el núcleo de sus procesos judiciales.
La aparición de Merlano ante el juez mantiene en foco público su situación legal y las repercusiones de su fuga en 2019, mientras se espera la decisión sobre el preacuerdo que podría afectar la duración y condiciones de su reclusión.
