Durante un foro en Barranquilla, varios senadores y altos funcionarios analizaron la Reforma a la Justicia que discute el Congreso, señalando preocupaciones por la impunidad y la ineficacia del sistema judicial, especialmente en casos que afectan al ciudadano común.
El senador Mauricio Gómez Amín (Partido Liberal) subrayó la necesidad de mayor eficacia. «No puede ser que un delincuente capturado esté libre en 10 horas, o que una mujer que denuncia maltrato siga siendo víctima a las pocas horas», afirmó. La senadora Paloma Valencia (Centro Democrático) coincidió, exigiendo penas más severas para delitos graves como el terrorismo y el asesinato de menores, y expresó preocupación por la falta de avances en estas áreas.
Por su parte, el senador Carlos Fernando Motoa (Cambio Radical) destacó las 67 modificaciones realizadas a la justicia en los últimos 20 años, muchas de ellas contradictorias. «Votamos en 2019 por la cadena perpetua para delitos contra menores; necesitamos coherencia y confianza en el sistema judicial», señaló.
La procuradora Margarita Cabello enfatizó que el sistema sigue lejos de responder a las necesidades jurídicas del colombiano promedio, mientras que la fiscal Luz Adriana Camargo alertó sobre el impacto del crimen organizado en el delito de extorsión. Camargo pidió fortalecer las investigaciones para desmantelar estas redes.
Finalmente, el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Gerson Chaverra, reconoció que el sistema penal acusatorio, vigente desde hace dos décadas, enfrenta congestión judicial e impunidad. «Hay casos en los despachos con más de 12 años de retraso», concluyó, resaltando la necesidad de reformas profundas y efectivas para restaurar la confianza ciudadana en la justicia.