Una multa equivalente a un salario mínimo mensual fue impuesta a la casa Funeraria Los Andes en Barranquilla, luego de permitir que el sepelio del aprendiz del Sena Alfredo William Cassiani Herrera, asesinado en medio de un robo, fuera acompañado por una multitud de personas, quienes pese a llevar puesto tapabocas, iban aglomerados violando el decreto del aislamiento obligatorio.
El sepelio que llegó al cementerio Universal, en el centro de Barranquilla, tuvo hasta coreografía de un grupo folclórico del que hacía parte la víctima.
Por este hecho, que causó rechazo entre la comunidad barranquillera, el alcalde Jaime Pumarejo llamó la atención a la Policía por no haber actuado y pidió sanciones además de la funeraria, para las personas que acompañaron el sepelio.
Con información y foto de BLU Radio.