El Ejército Nacional desplegó 300 uniformados en la región del Catatumbo para fortalecer la seguridad y enfrentar la violencia causada por el Eln y las disidencias de las Farc, que han intensificado los enfrentamientos armados en la zona.
Según el general Giovanni Rodríguez, comandante de la Segunda División, estas tropas buscan neutralizar las confrontaciones entre grupos armados que han afectado gravemente a la población civil en municipios como Tibú, El Tarra y Convención.
En coordinación con la Fuerza Aeroespacial de Colombia (FAC), el Ejército ha desarrollado operaciones de evacuación para asistir a las víctimas de los enfrentamientos. Entre los casos atendidos se destaca el traslado de heridos, como una mujer estabilizada en la vereda Tres Aguas y llevada a un hospital de Cúcuta, así como dos firmantes del Acuerdo de Paz amenazados por grupos armados. Estas acciones son lideradas desde el Puesto de Mando Unificado instalado en la región.
El presidente Gustavo Petro, tras calificar como “crímenes de guerra” los asesinatos de civiles y firmantes de paz por parte del Eln, anunció la ruptura de diálogos con este grupo armado. Petro llegó a Tibú para liderar un Consejo de Seguridad con la participación de la sociedad civil, autoridades locales, la cúpula militar y representantes del Gobierno, en busca de estrategias para garantizar la seguridad en el Catatumbo.
