Un nuevo registro de apareamiento de oso andino (Tremarctos ornatus) fue documentado en el municipio de San Agustín gracias al uso de cámaras trampa. Este hallazgo, considerado un acontecimiento científico relevante, se convierte en el tercer registro de cópula de la especie en el sur del Huila.

El grupo de monitoreo Serankwa, con el acompañamiento de la Corporación Autónoma Regional del Alto Magdalena (CAM), obtuvo las imágenes durante sus labores de seguimiento de fauna silvestre. Las cámaras trampa permitieron registrar el comportamiento natural de los ejemplares sin intervenir su entorno, contribuyendo a ampliar el conocimiento sobre esta especie emblemática.

De acuerdo con la bióloga Katherine Arenas, el registro demuestra que el territorio huilense no solo mantiene presencia constante del oso andino, sino que también ofrece condiciones óptimas para su reproducción. Esto refleja la efectividad de los esfuerzos de conservación y la participación comunitaria en el monitoreo ambiental.

El evento involucró a dos individuos identificados como “Serankwa” y “Panqui”, residentes del Parque Natural Regional Corredor Biológico Guácharos–Puracé. Los tres registros de apareamiento conocidos hasta ahora se han producido en el mismo punto, un árbol denominado “Rascadero”, lo que sugiere que el sitio funciona como espacio clave dentro del corredor ecológico.

Los investigadores destacaron que el registro de diferentes parejas reproductivas evidencia una población activa y genéticamente diversa, un signo alentador para la conservación del oso andino en el Macizo Colombiano. En el Huila, la especie ha sido detectada en al menos 17 municipios, lo que confirma la continuidad de los ecosistemas que sustentan su supervivencia.