El presidente Gustavo Petro fijó como meta entregar 600 mil hectáreas de tierra fértil al campesinado colombiano para el 2025. Este esfuerzo también busca aumentar las Zonas de Reserva Campesina como parte de la Reforma Agraria prometida en los acuerdos.
El mandatario destacó que su gobierno ha entregado 300 mil hectáreas hasta ahora, lo que representa solo el 10% de los 3 millones pactados en el Acuerdo de Paz. En comparación, señaló que el gobierno anterior apenas distribuyó 4 mil hectáreas. «Mi aspiración es duplicar esa cifra, apoyar las cooperativas campesinas y garantizar que el crédito fluya hacia el sector rural», expresó.
Petro criticó al Congreso por no aprobar las normas necesarias para facilitar la transferencia de tierras improductivas al campesinado. Además, señaló que muchas de estas tierras están en manos de descendientes de paramilitares, lo que dificulta el acceso para los pequeños productores. «Es esencial que se cambien las normas que bloquean el cumplimiento del Acuerdo de Paz», afirmó.
El presidente instruyó al ministro del Interior para que aplique las mismas disposiciones legales utilizadas en proyectos urbanos, como la construcción de carreteras o sistemas de transporte, al acceso de tierras rurales con fines agrícolas. «No se necesitan nuevas leyes, basta con usar las existentes para garantizar el acceso a tierras productivas», sostuvo.
Con estas iniciativas, el gobierno busca avanzar en la redistribución de tierras como un paso clave para la seguridad alimentaria y el desarrollo rural, priorizando a los sectores más vulnerables.
