Durante un acto de entrega de tierras a campesinos en La Gloria, Cesar, el presidente Gustavo Petro reiteró su llamado a construir un Acuerdo Nacional con los sectores políticos y económicos del país, advirtiendo que este pacto no debe hacerse con un pueblo “arrodillado” ni ignorando sus derechos. Insistió en que es momento de un diálogo que permita transformar el país con justicia social.
El mandatario aprovechó el evento, considerado clave para su Reforma Agraria, para proponer nuevamente una gran movilización social que impulse la participación popular. «Llegó la hora del pueblo», afirmó, al tiempo que defendió la bandera de Bolívar como símbolo de una lucha decidida por la equidad y la soberanía.
Petro también se refirió a la propuesta de Consulta Popular radicada en el Congreso, cuestionando la negativa del Senado a permitir que el pueblo decida, especialmente tras el archivo de la Reforma Laboral por parte de la Comisión Séptima. Criticó duramente a los senadores responsables de esa decisión, calificándolos de “irresponsables con la patria”.
Finalmente, el presidente subrayó que la soberanía reside en el pueblo, como lo establece la Constitución de 1991, y reiteró que si se niega la Consulta, se le está cerrando la puerta a una vía democrática de resolución. Afirmó que la consulta no es un capricho, sino una herramienta legítima para que la ciudadanía exprese su voluntad.
